domingo, 16 de diciembre de 2012

NAMASTEY LONDON

 NAMASTEY LONDON


                Una película que es un regalo, es bonita, graciosa en momentos, y la mayor parte del tiempo sufres con Arjún ( Kumar) la cabezoneria de Jazmeet ( Katrina) que por oponerse a su padre insiste en casarse con el niño grande de Charlie Brown, que por cierto se llama como el amigo de Snopi; y la verdad es que no es muy serio que,  con la maravilla de marido que le buscó el padre en el Punjab, ella esté tonteando con el blanquito. Es verdad que a veces nos atestamos en tonterías.  Personalmente no puedo ver sufrir a Akshay ni en una película..



    El argumento es una historia de amor que termina bien, pero creo que un poco tarde, no nos da tiempo a ver el encuentro ni la felicidad en la cara de Arjun por conseguir, por fin, el amor de Jazz. Demasiada carrera por el puente vestida de novia, que queda muy bien, pero todo para no enseñarnos el encuentro entre los protagonistas, y teniendo en cuanta que llevamos dos horas sufriendo con Arjún, y esperando que Jazz abra los ojos de una vez, creo que los espectadores merecíamos una buena escena de encuentro y amor sin limites, me he quedado un poco fría con el final.


       Los actores muy bien, y eso que Katrina Kaif no es santo de mi devoción  los personajes son convincentes si quito el cambio tan radical que la brumosa London opera en el protagonista hasta entonces risueño y alegre punjabí; la situación que se le presenta no es moco de pavo, así que veoun poco  justificado el cambio.
       Me ha encantado la escena en la que están visitando Londres después del partido, me parece que muestra muy bien los sentimientos de Arjun y las grietas en la resistencia de Jazz, y casi no hablan.... me gusta. 
       La música también es bastante bonita, y las canciones se ajustan muy bien al tema del argumento, que en otras películas te sorprenden con una canción en el Tirol sin venir a cuento, y la verdad es que para la sensibilidad occidental parece un poco raro.

        Lo dicho una pelicula redonda si quitamos el final tan vacío de contenido y tan poco sentimental.






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